Representación de funciones de segundo grado
Como hemos dicho, el álgebra ha
sido una vital herramienta para describir
y explicar relaciones. En matemáticas, la relación entre dos variables que cambian al mismo
tiempo se les conoce como funciones.
Dentro de este ámbito existen las funciones lineales, cuadráticas, racionales, trigonométricas, logarítmicas…,
en fin, una amplia gama de ejemplos que varían desde las correspondencias más simples hasta las más complejas. Las funciones
lineales poseen diferentes métodos para representarse por sí solas, y ello no
es exclusivo de este grupo, sino que se extiende a nuestro tópico central: las funciones
cuadráticas o de segundo grado.
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| Representación de f(x)= 2x+1 |
No obstante, antes de abordar de tema central, es esencial
conocer los aspectos en el mismo ámbito de sus hermanas lineales. Para ello, es
necesario plantearse la pregunta ¿Cómo
se representan las funciones lineales? Múltiples autores señalan que
existen cuatro métodos fundamentales para expresar la verdad de una función: mediante
una tabla de valores, dentro de la
cual se obtienen directamente los datos que corresponden a ambos ejes; un conjunto de pares ordenados, extraídos de una tabla de valores y acomodados
como coordenadas en x y y; una , el método más preciso para escribir una función; o
una gráfica, que explica globalmente
el comportamiento de la relación y los valores de los ejes.
No es difícil deducir que en los dos primeros casos, la
diferencia entre las expresiones lineales y cuadráticas es casi nula, pues la
sustitución de valores no representa ningún problema. En cambio, obtener tanto
la fórmula y la gráfica de una función de segundo grado es un proceso que
rebasa los límites de la intuición natural.
Al observar la fórmula de las ecuaciones de primer grado, es
posible encontrar una relación estrecha entre estas y sus sucesoras. La forma ax^2+bx+c de las ecuaciones cuadráticas mantienen
la misma estructura que las lineales, sólo que se omite el término elevado al
cuadrado. De esta manera, podemos interpretar las ecuaciones de segundo grado
como expresiones algebraicas que entre otras características, contienen un término elevado al cuadrado, una variable y
un término independiente.
| Forma de una ecuación cuadrática |
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| Forma de una ecuación lineal |
Las parábolas, a su vez, poseen sus propios rasgos de identidad.
En ellas encontramos los nuevos conceptos de vértice, puntos de corte al eje X y punto de corte al eje Y. En el
primero se habla del punto más bajo de la parábola, como se muestra en el ejemplo.
Este valor en el plano cartesiano es calculable gracias a la fórmula (-b)/2a, donde b es el valor
de la variable y a el del término
elevado.
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| Parábola de una ecuación cuadrática, donde el punto más bajo representa el vértice, los cortantes a X los puntos de corte al eje X y el punto en verde en el eje ordenado el punto de corte al eje Y. |
En el segundo caso, el de los puntos de corte al eje X alude a dos valores de X mientras Y es cero. Mediante la fórmula general de las ecuaciones de segundo grado
Finalmente, el punto de
corte al eje Y hace referencia al valor que Y adquiere cuando X es cero. Cuando
el procedimiento pasa por la fórmula general, ambos casos resultan en el mismo
resultado, por lo que se cumple con la condición de que “a cada valor de X corresponde uno único de Y”
Estos métodos presentan eficacia al generar una función
cuadrática, y como se ha visto, muestran el contraste que existe con las
relaciones más simples, como lo son las ecuaciones lineales.




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